GPH

A las nuevas generaciones GPH

Llegamos a la edición 50 del Gran Premio de La Hermandad. Carrera que ha crecido con los años y el valor de las gentes que han sido el aliento de vida en esta osada aventura que nos dejó mucho más que una competencia.

El GPH como le conocemos hoy necesita urgente de nuevos aventureros que vuelvan a encontrar la senda de aquellos que sin pensar, hicieron de esto, un sentimiento que no sólo traspasó las fronteras, también vidas, sueños e ilusiones. En grandes y niños.

Las nuevas generaciones son hijos de lo breve y directo, por ello; me enfocaré plenamente en la tercera generación que llega a La Hermandad.

Si tienes menos de 27 años te pido guardes estas palabras. Sé que debo ser breve, pero hay cosas que los más viejos no debemos dejar de lado…. como decimos «por el bien de ustedes».

La Hermandad creció de la forma que ya saben. Hizo soñar, así como ustedes la soñaron.

Hasta que llegó la generación que se enfrentó a la modernidad, a los cambios generacionales y a la imperante necesidad de estudiar mucho para que el tsunami de evolución que llegó, no nos pase por encima.

Lamento profundamente decirles que nos pasó más de una vez por arriba y nunca nos pusimos de acuerdo en cómo debiamos enfrentar la ola.

No podemos obviar que años gloriosos son parte de nuestra generación, pero tampoco debemos confundirnos. Pero urge la necesidad de que hoy se asuma la realidad con menos pasión y locura. Con mucha más cordura y profesionalismo.

Hoy La Hermandad está en sus manos. Las bases de esto es la locura, pero esa locura hoy necesita medicación.

El remedio no es por una enfermedad grave, sólo es un tratamiento que nos devuelva la vitalidad de los últimos 50 años y los lleve a mantener vivo lo que hoy heredan.

Es cierto que nosotros tuvimos una mejor herencia, creo que muchos lo reconoceremos. Sin embargo, ustedes tienen hoy, más y mejores herramientas.

Hay que definir la escencia de la carrera, saber que llegar de un pueblo a otro es el núcleo del evento y competir es parte de ello, pero todos los años hay una nueva competencia. Como todos los años también se renueva el espíritu y las ilusiones.

Hoy nos peleamos, pero mañana el deber manda. El tiempo lima las asperesas y el que siempre gana es el GPH.

Siempre el GPH…..

La tienen diificil, pero más dificíl la tuvieron en 1974.

Luchen… trabajen mucho, y principalmente; eduquense.

Los medios juegan un rol fundamental en la educación, involucrense también en ellos.

Debatan, discutan y planteen ideas. Esto les ayudará a aclarar ideas, pero también a dejar puntos claros que obligará a otros a leer más de lo que acostumbraban. Recuerden siempre que ya está todo inventado, y que buscando encontrarán.

Los viejos cometimos errores y los seguimos cometiendo, somos la generación que usufructuó de lo que construyeron los próceres de La Hermandad.

El tiempo nos ganó el clasificatorio y las dos etapas….. Mañana no sabemos cuantas etapas o especiales de correrán. Sólo tengo la certeza que se debe seguir corriendo. Se debe seguir uniendo la Tierra del Fuego en un sólo grito!!!

Pero para eso…. no se olviden que hay que medicar a esta longeva de más de 51 años y que llega a pelear su batalla 50.

Si me piden parte de una receta, les diría. «A veces, menos es más, y que en otras con lo simple sobra y basta».

Éxito en la misión. No será fácil, pero sabido es; que no es para cuelquiera….. a no cagarse!

Larga Vida al GPH